"Todavía amanece" Antología poética de María Sanz, 2007-2022
Si un libro de poemas ha de llevar un prólogo, tiene que ser un buen prólogo. En caso contrario sobra completamente. En "Todavía amanece" el acierto del prólogo tiene mucho que ver con que no está dispuesto a prevenirnos ni a anunciarnos lo que vamos a leer, sino que quiere presentar a la autora y situarla en su contexto. No faltan los prologuistas avezados que repiten versos allá y acá, destripando la cuestión y adueñándose por tanto de lo que debe guardarse para el momento oportuno, esto es, el tiempo en que te adentras en los poemas sin guía ni faro, solo con tu propia intuición y con lo que el poeta, en este caso la poeta, quiera ofrecerte como referencia. Convenimos, entonces, en que el prólogo que ha escrito Enrique Gracia Trinidad, también poeta, es una excelente apertura u obertura, ya que la poesía es música, para lo que viene después. Me paro en él porque además de plasmar el telón de fondo literario y vivencial de María Sanz hace suya una reivindicación que debería haberse resuelto. La que surge cuando, después de cuarenta años de profesión y de cerca de sesenta libros publicados, aún no se ha reconocido como debiera el valor poético de la autora. La explicación a este hecho ha de darla quien la tenga, pero la constancia que se deja aquí es clara y yo añado algunos detalles más: el Nacional de Poesía debería haber llegado ya y lo mismo otras satisfacciones que al escritor se le deben. No diré nada de la falta absoluta de visión que siempre presenta, una vez y otra, porque aquí no hay escarmiento alguno, la ciudad natal de la escritora, es decir, Sevilla, a la hora de recompensar a sus hijos más preclaros, salvo que estos lleven capirote, sean famosetes o canten sevillanas. Podría decirse que también escribir en Sevilla es morir. Podemos preguntar, si no, a todos aquellos poetas que tuvieron o quisieron alejarse de un territorio tan inhóspito para la cultura, lo que no deja de ser sumamente extraño, habida cuenta de la hermosura que la ciudad arrastra. Qué maravilla, sin sevillanos, Sevilla. Dejémoslo ahí.
"Todavía amanece" presenta una selección de poemas de un importante número de libros que la autora ha publicado en estos últimos quince años. De modo que contiene la producción más cercana, la más asentada y madura, la que se acerca más a su ideal poético actual. En los versos y en las dedicatorias descubrimos referencias cultas, no solo literarias sino también artísticas, musicales, pictóricas, porque esto es un santo y seña de Sanz, que tiene inquietudes más allá del poema, aunque el poema sea, sin dudarlo, el camino elegido, el transitado espacio por el que circula y que no ha querido nunca abandonar. Sería imposible quedarse con unos pocos versos o con un poema entre todos. El lector aportará su propia mirada a lo que lee, como sucede con toda la buena poesía y escribirá con todo ello su recuerdo de cada poema, uniéndolo sin duda a su experiencia, a lo que ha sentido y vivido antes, de igual modo que Sanz pone en circulación cuando escribe una generosa cantidad de su yo y lo comparte con los lectores a través de la palabras. Verso y vida tienen aquí una innegable puerta de entrada al sentimiento, de modo que podría fotografiarse con una máquina invisible el quehacer de una existencia entregada a la causa de la poesía con solo fijarse atentamente en el decir pausado de los versos.
La poesía de María Sanz es una poesía sin prisa, sosegada, lo que no quiere decir pasiva ni tranquila, todo lo contrario, porque contiene torrentes desbordados y también rebeldía, brotes salados de una disconformidad que subyace en el tono y en el requerimiento, como si hubiera una perenne interrogación y una duda que saldar. La duda yace en el fondo de la poesía del mismo modo que se enhebra con la filosofía y es el soporte más exacto de lo que llamamos conversación, ese hilo que une los pensamientos antes que estos incluso se conviertan en vertido incontrolado, quizá sin poderlo evitar, de las palabras. Para Sanz, ser poeta equivale sencillamente a ser.
La colección Averso Poesía, de Aliar Ediciones, publica por primera vez a María Sanz y consigue un libro bonito en su aspecto exterior, cuidado y lleno de detalles que enmarcan de manera adecuada el contenido. Demasiadas veces la poesía se ve necesitada de un envoltorio que la dignifique y la convierta en lo que debería ser, una atrayente lectura que va más allá de los sentidos y que nos hace más humanos y más íntegros. Con "Todavía amanece" el conjunto de la obra literaria de María Sanz, no solo poesía, también prosa, da un paso más y demuestra que la inspiración, cuando se une al trabajo y al talento poético, no tiene puerta de salida, sino caudal imparable, redención posible.
Todavía amanece. Antología poética 2007-2022
María Sanz
Prólogo de Enrique Gracia Trinidad
Aliar Ediciones, colección Averso Poesía
Febrero de 2025
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