Salter escribe como si estuviera contándonos las historias sentado en un sofá, mientras nos servimos un café cargado y desplegamos un periódico en el que las noticias de sucesos hablan de bombardeos, de aviones que sobrevuelan países exóticos o de encuentros clandestinos en lugares inhabitables. Desenvuelve los diálogos de sus historias al tiempo que revela el argumento pero cuidando muy bien de que esté en su mano el último movimiento de ajedrez, la vuelta de tuerca que evitará el spoiler. Una trama misteriosa y, a la vez, evidente. ¿Cómo no sospechaste antes, al ver que era Susanna la elegida para compartir esa última noche con ellos, con Walter y Marit? Walter Such es un traductor que escribe con una pluma verde y eso debería bastarnos para levantar nuestras sospechas acerca de él. Marit está enferma, muy enferma, mucho, enferma de esa forma tan nítida, con esos síntomas tan claros, con esa enfermedad que nadie nombra, aunque existe, prolifera, se lleva a los mejores y n
¡Cumplimos 15 años! 2009-2024