Clint y Edna
Los dos nacieron el mismo año. Fue en 1930. En mayo el actor, en diciembre la escritora. Ambos, por lo tanto, han cumplido o cumplen en 2023 los 93 años. Qué cifra...Él nació en San Francisco y ella en Tuamgraney, Irlanda. No es una circunstancia nimia. Mientras él se educó en libertad y sin ataduras, ella tuvo que sortear imposiciones y un rígido sistema educativo y familiar. Creo que no se han conocido. Al menos ella no lo cita en sus Memorias, donde sí nombra a otros actores con los que ha coincidido alguna vez en fiestas londinenses. Clint y Edna, a pesar de sus paralelismos, no se han encontrado nunca. O todavía.
Edna se casó y se divorció. El divorcio le supuso una gran cantidad de problemas y mantener la custodia de sus dos hijos fue un calvario. En cambio, Clint es un tipo que ha tenido muchas relaciones y muchos hijos, con los cuales parece tener esa relación respetuosa que se establece en algunas latitudes y no en otras. Sus vidas, en ese sentido, no pueden ser más dispares. Sin embargo, la literatura le abre a Edna las puertas de las relaciones sociales y aunque ella todavía piensa que eso ha sido un sueño está claro que escribir la convierte en otra persona en todos los aspectos. Y, desde luego, nadie podría decir que Clint no ha sido llevado por el cine y por su trabajo, a un lugar que muy pocos ocupan. La gente lo adora.
Nada que ver entre uno y otro en cuanto a popularidad y conocimiento entre el público. El cine de Clint es reconocido universalmente, tanto como director, productor, guionista, músico y actor. Un todoterreno con sensibilidad y estilo. Sigue trabajando a sus 93 años, pronto estrenará una nueva película y en ella volcará toda esa ternura firme y segura que lo caracteriza. Sigue siendo atractivo y encantador. Por su parte, Edna escribió hace poco la novela La chica, que ambientó en Nigeria, país donde estuvo un tiempo con cerca de noventa años. Vive de alquiler en una casa londinense en Marylebone y sigue escribiendo. Sigue guapa. Sigue enormemente comprometida con todo lo que la ha convertido en un ídolo, no de masas, sino de las mujeres que entendemos el papel de la literatura.
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