Olvidar la palabra
(Joseph Rodeare DeCamp. Escuela de Boston. 1858-1923)
Quise dejar a un lado la palabra, el eco cotidiano de sílabas y letras que siempre me acompaña aunque no sepa cómo. Quise olvidar el sonido de los versos escritos, de frases pronunciadas al teléfono. Quise olvidarte todo. Quise dejar de ser y de sentir, dejar de amarte, dejar de convertirte en un relato, dejar de ansiar que un mediodía de sol, al fondo de la calle, tu figura se alce entrevista, llena de plenitud, ya para siempre.
He querido asomarme al interior y descubrir que siento esa tibia penumbra de los años perdidos, ese rumor incesante de olas que nunca se terminan de encontrar, esa noche callada de los sueños, inundados de cuerpos que se abrazan. He querido asomarme a la distancia que existe sin que pueda evitarlo, está, se vive, es ella, pero no tengo forma de descubrir su estado, su esencia, su por qué.
Ahora sé que no puedo. Que tengo que llorarte amargamente si quiero conocer lo que es amor para luego perderte sin otra solución que un adiós sin despedida alguna. Ahora sé que te pierdo. Que nunca te he tenido y que te pierdo. Que nunca has conocido cuántas veces tu nombre se aparece en mis sueños para decirme "basta", no me llores, apaga ya el dolor y termina de escribir con los besos esa cálida luna de todos los inviernos, de todos los otoños, de toda soledad, prendida, entera.
Comentarios