(En la Feria del Libro. Archivo personal de María Sanz)
Una Isla de Papel
entrevista a
María Sanz
poeta
Poesía, oh la poesía. Mucho más que palabras, más que medida, más que música. Poesía, un caudal que sobrepasa la emoción, que desborda el cauce del papel, que provoca una tormenta de interior. Pasión, fuego, diamante, fuerza, vida. Poesía, oh la poesía...
Entre libros, siempre entre libros. La poeta sevillana María Sanz navega entre libros. Libros de poesía pero también ensayo, libros de historia o de arte, novelas, libros de filosofía, siempre libros a su alrededor, muchos de ellos colocados firmemente, ordenados, prestos, en las estanterías de su casa, que aparecen junto a ella y muy cerca de un arsenal de fotos cuajadas de momentos. Esos instantes de dicha que perduran cuando el clic del fotógrafo los inmortaliza. Libros e imágenes. A modo de testimonio de vida y de obra. Aquí estoy yo, esta soy. Y en las palabras que siguen mucho de lo suyo trasciende y llega hasta sus lectores. Con todas las consecuencias. La infancia, la familia
"Tuve una infancia feliz dentro de una familia entregada y cariñosa, en continua convivencia con abuelos y tíos. Mis aficiones siempre fueron la lectura y los juegos creativos. También disfrutaba mucho contemplando la luz, las flores, los árboles, las fuentes y todo lo que me regalaban los Jardines de Murillo, situados frente a la casa donde nací. Estas mismas sensaciones las captaba igualmente en la pequeña finca familiar donde pasaba los veranos, y con más amplitud y ensoñación, si cabe.
"Recibí las primeras enseñanzas en el colegio de las Monjas de la Caridad, quienes consiguieron que a los seis años ya supiera leer y escribir correctamente. Después hice el Bachillerato Superior de Letras en un instituto nacional. De ambos centros educativos guardo un entrañable recuerdo y un magnífico aprendizaje".
Mi madre
"Mi madre fue siempre mi mayor y principal alentadora, porque tenía mucha intuición y se dio cuenta de que había elegido un hermoso camino creativo. Posteriormente, algunos poetas y profesores amigos fueron ayudándome con sus experiencias, orientaciones y enseñanzas literarias, algo que siempre les agradeceré enormemente. Y sus críticas también, por supuesto".
Llega la poesía
"A los doce años escribí mis primeros versos, tras un viaje a Soria con mis abuelos paternos. No conservo aquellos poemas, pero tengo en la memoria que fueron inspirados por los paisajes castellanos, mientras notaba un claro contraste con los andaluces. Más tarde, ya en el instituto, sentía la influencia de algunos poetas clásicos y, sobre todo, de Juan Ramón Jiménez y Antonio Machado.
Pocas veces mostraba mis borradores, porque siempre me faltaba tiempo para los estudios de un bachillerato que tanto exigía en aquella época. Pero todavía guardo algunos, manuscritos y en buenas condiciones de legibilidad.
No recuerdo fechas anteriores a la adolescencia, pero sí que escribía como algo natural, espontáneo, ayudada por la música y otros factores juveniles, sin una exactitud en el tiempo, sin prejuicios ni timideces. Aunque siempre supe que la poesía era una vocación que, si no me desanimaba, le daría sentido a mi vida".
Los premios, los libros
"Mi primer premio, convocado para poetas menores de veintiún años, lo obtuve en Lugo en 1976 con un poema titulado “Cronos”. Pero fue en 1980 cuando gané un certamen para libros de poesía en Jerez de la Frontera, lo que significó mi primera publicación. Desde entonces he seguido participando en muchos y distintos certámenes, siempre con la intención de poder editar mis obras en limpia competencia y por méritos propios. Algunos galardones iniciales, como “Ricardo Molina” o “Carmen Conde”, supusieron incentivos bastante importantes para avanzar en un proyecto poético que cada vez requería más. Y a estas alturas de la vida, sé que acerté plenamente eligiendo esta forma de sacar adelante mi poesía, sobre todo por conseguirla sin tener intereses creados y con la absoluta libertad que ello conlleva.
En los primeros tiempos escribía sin tener muy bien encauzado el poema o el pensamiento global. Luego fui perfeccionando y consolidando las ideas y conceptos sobre lo que sería mi camino poético. Ahora ya sé lo que quiero expresar o comunicar en cuanto me viene la inspiración, pero con mucha más calma, intentando modificar solo lo necesario. Y siempre con la música, ya sea clásica o de otros estilos, como impagable ayuda y compañía.
Mi formación, mis lecturas y el ambiente en que he vivido han sido muy importantes durante los más de cuarenta años que llevo escribiendo. Creo que nunca hubiera concebido mi obra poética sin ellos, aunque los más decisivos fueron siempre los dos primeros. La calle o el ambiente, tan importante para muchos escritores, apenas influyeron en mi trayectoria lírica.
A tres de mis obras le doy especial significado: La primera, “Tierra difícil” (1981), por ser mi primera obra editada. En segundo lugar, “Tu lumbre ajena” (2001), la cual considero como eje central y compendio de toda mi poesía, y para el tercer título elijo “Ciudad a solas –Obras completas sobre Sevilla-” (2018), porque contiene los cuatro libros que he dedicado íntegramente a mi ciudad natal".
Esos niños
"La poesía para niños no era una poesía que me interesara mucho, hasta que en un momento dado pensé escribirla y así ampliar mi círculo lírico. Después vinieron los frutos en forma de cuatro libros con ilustraciones, publicados bellamente, que me han deparado muchas satisfacciones.
Siempre he vivido muy buenos momentos recitando para niños y adolescentes. Al final de mis lecturas en las clases, invitaba a los alumnos a que leyeran también para sus compañeros, con lo cual conseguía que participasen y hasta se divirtieran con esta actividad diferente. Me encantaban aquellos encuentros y los numerosos y originales regalos que me hacían. Gracias a esta interesante actividad, he recorrido buena parte de Andalucía y otros lugares a nivel nacional".
La vida cotidiana
"Como bien saben quienes me conocen, la música es principalmente lo que más me apasiona junto con la lectura. Desde mi infancia entendí que, sin ellas, nunca conseguiría acercarme a la belleza, a lo sublime, a la perfección, a la armonía… Ahora creo que acerté plenamente con estas elecciones. Y mi día a día es normal, hogareño, siempre manteniendo la templanza y la serenidad que tanto valoro en estos tiempos convulsos. Pero la pérdida de mi madre y la soledad siguen siendo mi mayor amargura.
Antes pensaba mucho en cosas que me faltaban, en las renuncias personales por dedicarme al trabajo y a cuidar de mi familia, en lo que todavía podía conseguir. Pero hoy tengo ya bastante perspectiva sobre mi vida, sintiéndome muy orgullosa de todos los sacrificios y esfuerzos realizados para llegar a ser quien soy y lo que soy, sin perjudicar a nadie, y todo ello compensado absolutamente por la poesía, mi única razón de vivir. Y quién no tiene asignaturas pendientes... Por ejemplo, haber encontrado un compañero de vida que entendiese mi vocación sin condiciones. Pero ya, a estas edades, supongo que es mejor seguir disfrutando de cuanto he conseguido".
...Y Sevilla
"Como en todas partes, aquí hay gente muy bien cobijada bajo diferentes paraguas editoriales, mediáticos o institucionales. En mi caso, viviendo a la intemperie poética, no puedo quejarme después de tantos años compartiendo actividades y proyectos a los que he sido invitada con regularidad. Pero por otro lado, también he vivido situaciones menos agradables, como cuando, tras ganar el premio Hermanos Machado, convocado por el ayuntamiento de esta ciudad, advertí una gran indiferencia oficial, y no tan oficial, el día de la entrega, hasta el punto de dejarme a solas en la Sala Apeadero al final del acto. Solo faltó que algunos me dieran el pésame por haberlo conseguido. Igualmente tuve que sufrir, unos años antes, defendiendo mi libertad al no acatar una costumbre establecida por una célebre entidad cultural, el acoso y la descalificación de quienes creyeron que yo era una poeta sumisa o deudora vitalicia tras aquella comparecencia literaria. Hoy día cada uno está en su sitio.
Siempre han existido grupos afines, gurús líricos o autores arrimados al poder de turno que van marcando tendencias, que indican cómo hay que actuar o hacia dónde encaminarse si se quiere destacar en la poesía, y todo para sobrevivir a costa de quienes se convierten en sus fieles servidores, en supuestos amigos cuya connivencia termina en un toma y daca que resulta tremendamente rentable. Pero esto tiene un precio de suma obediencia que yo jamás he pagado. Ni me ha hecho falta. Actualmente soy muy rigurosa y selecta a la hora de asistir a actos literarios, porque ya solo tengo compromisos conmigo misma".
De ahora en adelante
"No me quita el sueño la valoración que se haga de mi obra si aplicamos lo que hoy se considera como calidad poética. Solo puedo sentirme muy agradecida por los lectores que tengo, y muy feliz por compartirla con bastantes interesados. También reconozco que yo no he sabido venderme para llegar a ser una poeta ubicua, ni mucho menos me acobardan los olvidos o ninguneos con que somos premiados quienes no le bailamos el agua a nadie. Pero al margen de filias y fobias, siempre ha habido autores mediocres que son unos excelentes relaciones públicas a la hora de conseguir objetivos o prebendas en cualquier género literario.
Escribo mucho menos que antes, pues pienso que lo que tenía que decir en poesía ya lo he dicho, pero siempre que algo me inspira lo aprovecho. También sigo participando en los premios, aunque poco, e intentando paralelamente que alguna editorial acepte mis inéditos.
Creo que nunca se termina de hacer un cómputo mientras queden versos por escribir, pero los más de cuarenta años dedicados a la poesía me han deparado muchas más complacencias y logros de los que hubiera soñado. Y ahí está mi curriculum para demostrarlo".
("Recado original" es el último libro que ha publicado María Sanz. Foto UnaIslaDePapel)
Estos son los versos que cierran el libro:
Y si el tiempo termina, no prolongues la hoguera.
Hasta donde tú sabes, nadie vuelve del fuego,
ni logra que la lluvia traspase sus cenizas.
Porque todo es así a cambio de estar vivo.
(Firma de María Sanz. Foto UnaIslaDePapel)
"Nunca tuve ambiciones profesionales, habida cuenta de que mi trabajo como administrativa era totalmente ajeno a la creatividad literaria. Desde los diecisiete años he contribuido a mejorar la economía familiar, y ese ha sido mi mayor incentivo a nivel laboral.
Mis mayores deseos son los mismos de siempre, leer, escribir, disfrutar de mi biblioteca, de mi música favorita. Y aunque apenas tengo tiempo para las redes sociales, al menos en la que estoy he conseguido hacer nuevos y excelentes amigos, amables seguidores y lectores, sobre todo para compartir los poemas que cuelgo a diario".
Y estos versos inéditos son de su próximo libro, que verá la luz en 2022 publicado por una editorial valenciana:
Apenas necesito más que el libro
que estoy leyendo ahora, o el poema
que escribo, para hallarme de regreso,
para sentirme cerca de los pájaros,
del oculto rosal donde me miro,
respirando la música de cámara.
Dialogo con la lumbre, con las sombras
proyectadas por mí desde el olvido,
más allá de lo ajeno, permanente
conversación que callo y que abandono
mientras la tarde crece en mi desnudo
exhibiendo los vértices rosados.
Apenas se adivina cuanto quise
hasta la saciedad, feliz ausencia
donde consigo separar lo cierto
de lo desmoronado, como el libro
que nunca leeré, como el poema
cuyas ruinas han de sobrevivirme.
Síguela en Twitter: @poetaMariaSanz
Página en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes:
http://www.cervantesvirtual.com/portales/maria_sanz/
Para saber más: https://es.wikipedia.org/wiki/Mar%C3%ADa_Sanz
Entradas en este blog:
Fin de trayecto, relato por María Sanz
Una historia de poetas, sobre su poesía
Once libros para el día del libro, recomendaciones
María Sanz en la Feria del libro de Sevilla
Reseña sobre "El primer reino"
Reseña sobre "Recado original"
María Sanz. Poesía.
Selección de poemas de María Sanz:
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