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"Una noche en el paraíso" de Lucia Berlin


En 2016, la publicación por la editorial Alfaguara de "Manual para mujeres de la limpieza" fue un absoluto suceso. El boca a boca funcionó de inmediato y el libro se encumbró a los primeros puestos de los más vendidos y fue, también, de los más leídos. Ambas cosas no siempre coinciden. La personalidad de Lucia Berlin importa, desde entonces, tanto o más que su obra. Como ocurre con todas las vidas estrambóticas, al filo de la navaja, su peripecia vital nos llama a intentar descubrir resquicios que expliquen el trasfondo de las historias que cuenta. Setenta y siete cuentos que ya se habían publicado en los años noventa sin demasiada repercusión, a pesar de que consiguió el American Book Award en 1991. 


(Lucia Brown en sus primeros años)

Fue la importante editorial norteamericana Farrar Straus and Giroux la que publicó el "Manual" en 2015, revitalizando la figura literaria de esta mujer. Era un momento muy oportuno. La literatura femenina, antaño arrumbada en los cajones, parcamente publicada y peor difundida, vive una época de oro que no solo se refiere a la nueva literatura sino a la que se ha escrito en los siglos XIX y XX, sobre todo ficción, multitud de novelas de las que no tenían noticia los lectores y que las editoriales, sobre todo las independientes, han decidido sacar a la luz, mostrando un caleidoscopio de personalidades y estilos que nunca debió estar oculto. En esta corriente de revisionismo femenino se enmarca la resurrección literaria de Lucia Berlin. 

Es verdad que el trazo grueso que se suele publicar sobre su vida hace alusión de una forma descompensada de sus andanzas, dando un realce que no tuvo a sus malos tiempos de empleada de limpieza o de recepcionista. También fue una chica educada en buenos colegios, que llegó a ser profesora de la Universidad de Colorado. En cuanto a su vida personal, como todas las hijas de madres despegadas, poco cariñosas y más proclives a la vida desordenada que a cuidar de su rebaño, ella anduvo de un afecto a otro seguramente en busca de alguno seguro. Su apellido lo toma de su tercer marido, el músico de jazz Buddy Berlin, y sus cuatro hijos tienen padres diferentes. Esto me parece anecdótico en comparación con su dedicación literaria y, sobre todo, con su mirada acerca de la vida y las personajes. No obstante, hay algunos aspectos poco conocidos de su existencia, como el tiempo que pasó en Chile, en época de colegiala, con su madre y su hermana, ya que su padre, ingeniero de minas, estaba ocupado en la guerra. Su español era muy bueno y lo había adquirido ya estudiando en Nuevo México. 



Cualquier acontecimiento puede ser narrado. El hecho de que esa narración llegue al lector y se constituya en literatura tiene que ver con la mirada y con el estilo. En cuanto a este, Berlin le pierde el respeto a las formas y las subordina al objeto de su relato, siempre con un aire fresco como si estuviera recién escrito, como si nos contara, de manera coloquial, lo que está viviendo. 

Su forma de concebir la vida y el mundo que la rodea añade a su mirada esa pátina de claridad y de casi sinceridad, más bien de honestidad, que tiene que ver con la empatía y la compasión que le producen la propia existencia y los seres desarraigados, vencidos, que no tienen sitio en los titulares de prensa nada más que en la sección de sucesos. 

"Una noche en el paraíso" es una colección de veintidós cuentos que han sido seleccionados por uno de los hijos de Berlin, Mark. El éxito del "Manual" ha dado lugar a que exista una importante expectación acerca de este nuevo volumen, que sale en las fechas cercanas al aniversario de su nacimiento y de su muerte. Lucia Berlin nació y murió el mismo día y el mismo mes, el 12 de noviembre. Desde Alaska, donde nació en 1936, hasta California, donde murió en 2004, hay toda una trayectoria geográfica y personal que la llevó a Nuevo México, Chile, Colorado, en ese vaivén vital que constituyó su vida y que salpica, y de qué manera, su obra. 


El prólogo del libro está escrito por Mark Berlin, el hijo que se ha encargado de seleccionar los relatos que forman el volumen. Sus palabras son admirativas y comprensivas. Su madre no es solo esa mujer con la cabeza loca y bastante alcohólica sino que, según dice, sus dos últimas décadas estuvo siempre sobria y fue capaz entonces de escribir lo mejor de su vida. También habla de que esas historias tienen parte de autobiografía, pero no del todo, son "casi" autobiográficas, dice. Como suele ocurrir con casi todos los escritores, salvo, quizá, aquellos que inventan un mundo de la nada y escriben literatura fantástica. Aun en estos, no obstante, me gustaría saber si alguno de sus monstruos imaginados no están tomados de un vecino molesto.

Resultan tan curiosos los temas que le interesaban a esta mujer en su faceta de escritora...Las pequeñeces en las que se fijaba y la forma en que las elevaba a la condición de objeto literario...El primero de los cuentos se titula "Los joyeros musicales" y empieza con unos niños de condición humilde vendiendo una especie de lotería ambulante. Inocencia a la vez que miseria, mezcladas en un cóctel imposible y muy humano. El título del segundo cuento es evocador "A veces en verano"y en él vuelven a aparecer Hope y su familia, que habían venido de Siria.

Todo está escrito en primera persona y eso le otorga todavía más verosimilitud a lo que narra, aunque sabemos que el matiz del tiempo ha oscurecido o agrandado los hechos y modelado a los personajes, aunque eso nos da igual a la hora de leerla. Es un gran fresco en el que hay comportamientos buenos y gente ruin, sentimientos a flor de piel y, sobre todo, peripecias, un gran número de peripecias contadas con naturalidad y sin poner el énfasis en las cosas más tristes. Historias pluriculturales porque en ellas aparecen gentes de nacionalidades diferentes y de orígenes distintos, atendiendo a la propia experiencia de la escritora, que se movió de un lado a otro durante toda su vida, enriqueciendo su punto de vista al máximo y reflejándolo en sus cuentos. Aunque todo esto simplemente son historias, como dice Mark Berlin, la historia es lo que cuenta. El título del libro se ha tomado de uno de los cuentos.


Una noche en el paraíso. Colección de cuentos de Lucia Berlin, con prólogo a cargo de Mark Berlin. La traducción está a cargo de Eugenia Vázquez Nacarino. Publicado por Alfaguara, primera edición en noviembre de 2018. El diseño corre a cargo de Penguim Random House Grupo Editorial, inspirado en el original de Enric Satué. El título original: Evening in Paradise: More Stories. 


(Imágenes de Lucia Berlin con uno de sus hijos y nota autógrafa de la escritora)

Comentarios

Silvia ha dicho que…
Me parece interesantísima la reseña. Me ofrece absoluta confianza. Te lo agradezco.
Caty León ha dicho que…
Me alegra mucho. Gracias por tus palabras y por visitar mi blog. Vuelve pronto.

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