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Rubias, sexys y entrañables

(Laurence Olivier y Marilyn Monroe en un fotograma de "El príncipe y la corista") Esa mala prensa de las rubias, hermosas, diáfanas, entregadas y dispuestas a todo con tal de conseguir gotas de felicidad, habría que desterrarla. El cine nos da sobradas muestras de que no siempre un aspecto voluptuoso significa poca cabeza o malas artes. Algunas de esas verdades se presentan envueltas en obras maestras que tienen una moraleja común: no te fíes del aspecto de una mujer porque puede esconder una científica nuclear a menos que te distraigas. De la misma manera que no existe la ecuación fea-inteligente, tampoco es verdad la que afirma que ser rubia es ser tonta. Aunque los caballeros las prefieran rubias y se casen con las morenas como bien sabía Anita Loos .  (En el set de rodaje de "La ventana indiscreta", la cámara recoge un momento de descanso en el que aparecen los protagonistas, James Stewart y Grace Kelly, junto con el director, Alfred Hitchcock)

Tres maneras de ser un héroe

Exley, White y Vincennes. Tres hombres. Tres carreras. Tres modos de portar un arma. Tres ideas sobre la vida. Tres obsesiones. Tres compromisos. Tres actitudes. Tres volcanes a punto de ebullición.  Cualquier excusa es buena para situar en la dorada ciudad de Los Ángeles, años cincuenta, una película de la serie negra. En este caso, bien valen los asesinatos de los clientes del Café Nite Owl, víctimas circunstanciales, sin ninguna importancia. Hay muertos de primera y muertos de segunda.  Exley lleva gafas (ningún hombre las lleva en la sección de detectives del departamento de policía de L. A. ), tiene un sentido del honor y el deber pasados de moda y es hijo de un preclaro antiguo miembro de la profesión. Así que sabe cómo llegar arriba, incluyendo contar (el verbo delatar estaría fuera de lugar en su vocabulario) quiénes han sido los responsables de dar una paliza a los acusados de las muertes del Nite. Así se las gasta este hombre de sonrisa distante y gesto tímido. 

Queridos libros...

Como se echa de menos el viento sur, la brisa de poniente, el rumor de los olivos que atraviesan el paisaje, las olas de un mar que nunca pierde su memoria...Como se echa de menos la palabra de alguien que esperas te comprenda, la voz de aquel que amas, la risa de lo cómplice, la imagen de lo bello...Así los libros tienen la paciencia de estar ahí para que los eches de menos, para que los encuentres al fin y al cabo.

"La señora Harris en Nueva York" de Paul Gallico

(Pintura hiperrealista de Robert Neffson, Nueva York, 1949) (Pintura hiperrealista de Richard Estes, Kewanee, Illinois, 1932) Este es un libro amable, un relato sencillo. Parte de una historia muy dura, un niño maltratado. Pero Paul Gallico pone el énfasis en lo bueno, en la gente que se ofrece generosamente para ayudar a los demás y así salva con elegancia lo sórdido. Es un punto de vista que rodea todo el libro. Lo mismo ocurría en "Flores para la señora Harris" la anterior novela de este autor que publicó también la editorial Alba en su colección Rara Avis. La idea de que todo es posible si uno pone el suficiente empeño y sobre todo, el suficiente corazón, sobrevuela ambos libros. A esto se añade la personalidad casi mágica de la señora Ada Harris , menuda, ingeniosa y atrevida, una mujer de la limpieza que vive en el East End y está dotada de una intuición única. El mayor cometido de esa cualidad es distinguir dónde está la buena gente y cómo poner

"Con el traje de los domingos" de Bernice Rubens

La cuestión está en que no puedo contaros demasiado de este libro porque, casi todo lo que cuente puede convertirse en spoiler. Y, creedme, aquí el spoiler es el fin de la historia. Eso sí, sabemos algunas cosas de George Verrey Smith, el protagonista, pero solo porque él nos las cuenta desde el principio. También sabemos que va a jugar con nosotros, que durante toda la narración va a convertirse en nuestro guía a través de su vida, que es, en realidad, su historia.  Luego está Joy Verrey Smith , su esposa, con la que lleva casado diecisiete años. Ninguna esposa de las que conozco viviría un matrimonio como el de Joy y George Verrey Smith. Quizá ocurra lo mismo con vosotros. Tampoco conocéis un matrimonio similar. Sin embargo, ellos llevan mucho tiempo y no descartéis que puedan seguir juntos, aunque eso volvería a ser spoiler.  El trabajo de George Verrey Smith (repito mucho su nombre porque él lo hace así y porque su nombre tiene un enorme significado en la historia) es m

"El último caso de Philip Trent" de E. C. Bentley

A Sigsbee Manderson , un rico americano, lo encuentra muerto su propio jardinero. Y aunque la policía no es tonta y las investigaciones parecen ir a buen paso, el pintor y detective aficionado Philip Trent no está demasiado conforme con lo que los periódicos detallan acerca del caso. Apasionado de los misterios, deseoso de hallar un desenlace acertado, Trent practica el arte de la deducción y este le conducirá a encontrar la verdad, que es la máxima aspiración de cuantos se enfrentan a un misterio de este tenor. Por eso acepta el encargo del director del Record y por eso se une en la investigación al experto policía inspector Murch. Como reconocen todos los críticos esta es la obra maestra de E. C. Bentley , escrita con la intención de dotar a la galería de investigadores de alguien con un uso maduro de la inteligencia, fuera de las boberías y los acertijos que hasta entonces habían mandado en el género. Precisamente por eso es el inicio de la novela policíaca moderna, un detec

"La caja negra" de Amos Oz

"La caja negra" es una novela epistolar en torno a una historia familiar de engaños, abandonos y dependencia. Ilana, Alec, Michel y Boaz son los cuatro protagonistas principales. La primera carta, la que dirige Ilana a quien fue su esposo, Alec, es la más intensa de todas, la que muestra cómo una mujer que ha sido abandonada tras su infidelidad, da cuenta a su exmarido de la situación en la que se halla ella misma y su hijo, Boaz, a quien el padre no reconoce. Ilana se ha vuelto a casar y tiene una hija con su nuevo esposo, Michel, un hombre aferrado a los preceptos de su religión que tiene una extraña forma de pensar y, sobre todo, de entender esa red de relaciones personales y familiares. Entre las cartas están también las del abogado de Alec, que pretende poner sensatez en sus acciones, y las de Boaz, escritas con faltas de ortografía debido a su ignorancia, a su alejamiento de toda instrucción y de todo lo que tenga que ver con obligaciones. Es un adolescente que se o

"Las hijas de otros hombres" de Richard Stern

“Hasta el día en que el señor Merriwether se marchó de casa-un mes después de su divorcio- ,los Merriwether parecían una familia serena e ideal” Este es el resumen del argumento de este libro. Las apariencias engañan, podría ser el tema general. Pero hay más. El amor, como fuerza que cambia las convicciones y nos mueve a actuar en un plano desconocido. La familia, con su correlación de afectos y desafectos. La pareja, que puede llegar a convertirse en tu mejor enemigo.  Los Merriwether viven en una casa bonita y agradable. Estamos en la década de los 60. Es una familia encantadora. Y todos leen. No son, por tanto, personas sin pensamientos propios, sin argumentos, sin ideas. Todos tienen algo que decir. Todos tienen posibilidades y expectativas. Incluso el personaje más excéntrico de todos, la tía Aggie. En la familia están Sarah, la esposa; Bobbie, el marido; Albie, el hijo mayor; Priscilla, una de las hijas; Esmé, la segunda hija, más guapa que la anterior y George, el

"El corazón de las nueve estancias" de Janice Pariat

Delicadeza . Esa es la palabra que me sugiere este libro. Ese es el concepto. Algo delicado pero no exento de verdad, de realidades no siempre aceptadas o entrevistas. El corazón de las nueve estancias tiene en su centro a una mujer y, en derredor, a nueve personas que la han habitado, que la han poseído, entendido o amado de alguna manera. Es un largo poema biográfico con sentido filosófico.  Esas nueve personas titulan cada uno de los capítulos:   el santo, el carnicero, el tutor, la enterradora, el profesor, el florista, el cruzado, el farero y el marinero. Tiene una dedicatoria mágica: Para quien se quedó a pasar la noche . En nuestra vida no todo el mundo tiene la oportunidad o el deseo de habitarnos. La noche es la antesala de la intimidad, del conocimiento y también del rechazo. He ahí la difícil cuestión que a todos nos incumbe. Lo que somos, cómo nos ven.  Luego está la cita de Anaïs Nin: Es fácil amar . Una especie de profesión de fe, un recordatorio, un propósit

"Confusión" de Elizabeth Jane Howard

En "Los años ligeros"  conocemos por primera vez a los Cazalet . Esta de ahora es la tercera entrega y también la publica en castellano la editorial Siruela, en su colección Nuevos Tiempos, como las anteriores, la citada "Los años ligeros" y "Tiempo de espera" que es la segunda de la saga.  La historia ha llegado aquí en este tercer volumen a los años cuarenta, decisivos para la historia de Europa, lo que viene a decir, del mundo occidental. En Inglaterra, en 1942, el conflicto bélico que tiene a la mayoría de los países en situación de combate o de alerta, genera unos cambios en la forma de vida que son muy notables.  La escasez, la vuelta de los combatientes heridos, la necesidad de posicionarse, los bombardeos, todo ello hace que la existencia sea una aventura en sí misma. Los Cazalet , cuyo detalle conocemos por los anteriores libros, han ido creciendo y este es el momento en que los jóvenes entran en el mundo de la adultez en el peor tie

Hoy...

Hoy he cerrado todas las puertas He apagado las luces al salir He borrado su nombre del teléfono He roto puentes y zanjado esperanzas. He arrojado con ira su pequeño afecto, Un simple, diminuto, insignificante afecto, En un contenedor lleno de suciedades Para que nada suyo se mezcle con la vida. Al fin, si no te aman como tú deseas, Llamarse amor no puede, es solo frustración. Una mentira que cuentas por si cuela, Una estupidez que se repite en sueños . He terminado una larga aventura En la que quise hallar perdido un paraíso, Una forma del agua que llevara mi eco, Que estuviera cuajada de abrazos sin medida. Pero al fin, si los cuerpos no se reconocen, Si no hay piel o si la piel no tiembla Ya nada puedo hacer que no sea arrepentirme Acunar el vacío, pero este es yermo y terco. De nada sirve que el calor te corrompa Que la huella del sol nos amanezca Tal vez tenga que convertirme en aire En surco de levante, en brisa de poniente. No he vuelto la cabe

Aunque tú no lo sepas...

Aunque tú no lo sepas eres a veces luz, la única luz, el único destello, la única claridad que resplandece. En la pequeña sombra que me habita escribo con tu nombre todas las emociones y observo las ventanas por si tu tibia luz apareciera, esa presencia tierna, esa presencia firme, esa presencia nueva, tú, tú solamente.  Aunque tú no lo sepas me invento geografías para guardar tu nombre, espacios en los que estás y no apareces, una huella en el barro de zapatos gastados, una voz, el aire de una voz, su cálido temblor, su eco, esa forma de hacer palpable la verdad cuando la tarde, siempre sin aviso, tiende su trampa al fondo de las músicas.  Aunque tú no lo sepas he llegado a crear tu propio abecedario, una legión inmensa de letras sin palabras, de adioses como besos, de besos sin sonido, de sonidos sin tiempo, de tiempo sin esperas, de esperas que se agostan, ellas sí, adormecidas, al lado de los sueños, aunque tú no lo sepas. (Fotografías de Lillian Ba

"Sanditon" de Jane Austen

Durante los meses de febrero y marzo de 1817 Jane Austen, que había terminado su novela "Persuasión", estuvo trabajando en un proyecto nuevo. Lo hacía con enorme dificultad porque ya estaba enferma. No salía de su casa a dar los paseos que tanto le gustaban y apenas se movía de la cama, pero la escritura seguía siendo más que nunca su motivación y su modo de continuar respirando. El libro, del que escribió doce capítulos, se llamó "Sanditon" y en estas fechas se ha puesto de actualidad al ser objeto de una miniserie de televisión.  La serie consta de ocho episodios y el primero de ellos contiene todo lo que dejó escrito Jane Austen. Es decir, a partir de ese inicio se va a desarrollar una historia inventada, cuya relación con lo que Austen quería decir es pura especulación. Nunca podremos saberlo. La circunstancia más curiosa es que la pareja protagonista, ambos jóvenes y atractivos, se conoce al final del capítulo doce, con lo que toda su relación queda

Demasiado sentimiento

           Me pasa a menudo con las amigas. Tener amigas es muy difícil para mí, es más, no estoy acostumbrada a tenerlas. Mis amigas son eso, presuntas amigas, no amigas de esas que puedes molestar a cualquier hora con una llantina sobrevenida. No. Son amigas tan ocupadas que me tratan como si fueran un médico que reparte citas. No sé, pero me parece que eso no son amigas como las que veo en algunas películas: está la protagonista llorando, feísima, tirada en la cama, incluso borracha a base de gin tónics consumidos en la peor soledad, con la música a todo trapo ( y sin que ningún vecino proteste, que esa es otra) y entonces llama a alguien, una amiga y va la amiga y se planta en su casa. Hay ocasiones en que ni siquiera tiene que llamarla, sino que la amiga tiene un sexto sentido y se presenta en casa de la doliente sin avisar y en el momento justo.  Como las películas suelen ser americanas plantarse en la casa de alguien a cualquier hora tiene mucho mérito. Estado