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Mostrando las entradas etiquetadas como Editorial Alba

Maltratadores y víctimas: La inquilina de Wildfeld Hall de Anne Brontë

El universo cerrado en el que vivían los Brontë , las tres hermanas y el hermano, produjo unos frutos literarios diversos. Esta novela de Anne Brontë  (1820-1849), podría resumirse diciendo que trata de un tipo maltratador psicológico, débil, pervertido y egoísta, así como de su víctima, una mujer que se enamora para su desgracia.  Helen Graham cree sinceramente que ella hará posible el milagro de que su marido se convierta en un hombre cabal y deje de ser un libertino, borracho y manipulador. Así lo creen también las miles de mujeres que se enamoran del hombre equivocado. Ellas luchan contra sí mismas y contra ellos para lograr su objetivo pero terminan destrozadas, hundidas, perdidas, cansadas y, a veces, con la esperanza muerta.  Lo peor de Arthur , el marido de Helen , es que no reconoce abiertamente su juego y eso origina que ella se sienta hasta culpable por las culpas de él. Es verdad que hay un sentido religioso en esa culpabilidad, pero también lo es que Arthur e

Un Dior para la señora de la limpieza

  Si eres una señora de la limpieza inglesa y dedicas tres años de tu vida a ahorrar libra a libra para comprarte un vestido en  Chez Dior. ..es que tu mente es extraordinaria y tu personalidad única. Eso es lo que hace la señora Harris, viuda y en la sesentena. Las señoras de la limpieza inglesas son diferentes a todas las que trabajan en el orbe, pero no esperaba tanta convicción, tanto deseo concentrado y tanta ilusión en un objetivo. Si fuera una ejecutiva de ventas, sería la ejecutiva del año.  Se trata de eso, sin duda, de querer algo con todas tus fuerzas. Así lo siente la señora Harris desde el día en que ve en el armario de una de sus clientas, la señora Dant, dos vestidos de la casa Dior que la dejan absolutamente enamorada. Puede una enamorarse de un hombre ( debe  una enamorarse de un hombre) y también de un objeto, por ejemplo, por qué no, de un vestido. Así que Harris (llamémosla así, apeando el tratamiento) se dedica a juntar una libra tras otra y prueba juegos

"Upstate" de James Wood

James Wood es un crítico literario de enorme prestigio. Los críticos literarios suelen esconder dentro de sí a un escritor frustrado o a un escritor en ciernes. No es para menos. El contacto diario con los libros es un modo de vida. Una manera de relacionarse con el mundo, con la realidad, con los sueños. Eso da lugar a una filosofía que tiene su santo y seña en la palabra, en la comunicación.  James Wood escribió una primera novela y ahora presenta esta, publicada por Alba Editorial y que es una historia sobre la familia. La familia es un núcleo social que está en declive y precisamente por eso resulta tan llamativa la elección del tema y la forma de desarrollarlo. El protagonista es Alan Querry, un hombre de sesenta y ocho años que vive en Inglaterra y que tiene dos hijas. Una de ellas se ha marchado a trabajar a Estados Unidos sin que ni su padre ni su hermana hayan ido nunca a verla. Esta es una de esas familias que se quieren pero que no lo demuestran. Una de esas familias

"El puente de Alexander" de Willa Cather

Esta fue la primera novela que escribió Willa Cather y, por eso mismo, ella sentía que se notaba demasiado la influencia de sus dos maestros, Henry James y Edith Wharton. Una maestría que, pese a no pasar desapercibida, es beneficiosa para el libro, sobre todo para un primer libro. No es poca cosa. En "El puente de Alexander" se narra el reencuentro entre dos personas que estaban condenadas a entenderse y que la vida separó en un momento dado. Los protagonistas, un hombre y una mujer de mediana edad, han tenido en común una juventud apasionada y el paso del tiempo no ha logrado borrar la esperanza de que ese tiempo perdure de alguna manera.  Bartley e Hilda se vuelven a encontrar cuando la vida de ambos ha tenido un desarrollo importante, cuando han conseguido muchos de sus objetivos y llevan una vida plácida. Pero a veces se dejan asignaturas sin resolver, sentimientos anclados en un momento anterior que no logran salir hasta determinado instante, cuando se produce u

Mi tía, Jane Austen

James Edward Austen-Leigh (1798-1874) era hijo de James Austen, el hermano mayor de Jane, ambos pastores de la iglesia anglicana como lo fue George Austen, el padre de James y Jane. George se había quedado huérfano a los nueve años y procedía de una familia de Kent relacionada con los textiles. Lo acogió su tío, el abogado Francis Austen, de Tunbridge. Llegó a ser rector de dos parroquias colindantes, las de Deane y Steventon, distantes entre sí 2 kms y situadas en Hampshire. George Austen se casó con Cassandra Leigh, hija menor del reverendo Thomas Leigh, de los Leigh de Warwickshire. Una característica familiar de los Leigh era el sentido del humor, algo que heredó Jane Austen .  El matrimonio Austen vivió cerca de treinta años en Steventon , adonde se desplazaron después de una corta estancia en Deane. La rectoría de Steventon es la casa familiar de Jane, el lugar de sus recuerdos. Veinticinco años de su vida los pasó allí. La zona estaba llena de pequeños terratenientes

"El arrecife" de Edith Wharton

Los libros de Edith Wharton  (Nueva York, 1862- Pavillon Colombe, 1937) dan la impresión de haberse escrito después de observar, desde una atalaya privilegiada, la historia, los actos, los pensamientos y emociones de unos personajes que, lejos de ser de cartón piedra, tienen los defectos y las virtudes que asociamos a la gente normal. Los lectores sentimos que podemos asomarnos a una intimidad que, de otro modo, nos estaría vedada. Las historias transcurren como un río, con sus altibajos, sus meandros, su nacimiento tumultuoso, su desembocadura. Estas son virtudes que hacen de ella una escritora singular, a la vez llena de un estilo culto y depurado, a la vez convertida en una amable contadora de sucesos. Una dualidad que en este libro tiene su expresión máxima porque sus personajes, sobre todo los cuatro principales, obedecen a ambientes y motivaciones distintas y, sobre todo, ocultan algo. Ese juego de ocultaciones, de medias verdades, de mentiras que no deben sobrepasar el espac

Una Jane Austen de quince años: Amor y amistad

!Qué libro tan precioso! Esta es la primera frase que quiero escribir, la primera sensación que he sentido. Precioso en su contenido, unos textos increíbles que no parecen escritos por una muchacha tan joven, de catorce a dieciséis años, y que revelan el talento a manos llenas, el talento en estado puro, el aviso cierto de que Jane Austen es una escritora inmensa.  Recojo de la solapa del libro, que ha editado con amor la editorial Alba , tan cuidadosa siempre en su selección y en la edición de sus libros, una definición de la literatura de Austen que no puede ser más pertinente y cierta: "Satírica, antirromántica, profunda y tan primorosa como mordaz" Estoy tan de acuerdo que quisiera que leyeran este libro todos aquellos desinformados que incluyen a Jane Austen en corsés que no se ajustan a lo que fue, a lo que es, porque la literatura siempre existe en presente. Ni fue una escritora romántica, ni lo fue victoriana, ni era gótica, ni seguía la tradición de su época.

"Harriet" de Elizabeth Jenkins

Intenso, demoledor, desasosegante, duro, frío, terrorífico. El libro de Elizabeth Jenkins te ofrece un comienzo engañoso. Parece que todo se reduce a una muchacha mal dotada intelectualmente, pero con dinero, y a un tipo egoísta y necesitado de pasta. Pero no es verdad. Nada es tan sencillo. El juego de personalidades enfrentadas en esta novela exigiría un estudio psicológico y mucho tiento para discernir a qué se debe la extraña relación entre los hermanos Oman, Lewis y Patrick ; o la soterrada envidia plagada de angustia que vive Alice en relación con Harriet ; o el papel de Clara, obtusa, sumisa pero, al fin, liberada del peso de un enorme secreto. Harriet es una chica acomodada por la herencia de su padre. Su madre está casada en segundas nupcias y trata cariñosamente a su hija, comprende sus limitaciones, acepta sus caprichos y sabe que, en el fondo de su cerebro opaco, hay bondad y deseos de ser feliz. Quién no quiere casarse de blanco y con sedas... La madre de la mu

"Flores para la señora Harris" de Paul Gallico

Si eres una señora de la limpieza inglesa y dedicas tres años de tu vida a ahorrar libra a libra para comprarte un vestido en  Chez Dior. ..es que tu mente es extraordinaria y tu personalidad única. Eso es lo que hace la señora Harris, viuda y en la sesentena. Las señoras de la limpieza inglesas son diferentes a todas las del orbe, son una especie de raza aparte, pero no esperaba tanta convicción, tanto deseo concentrado y tanta ilusión en un objetivo. Si fuera una ejecutiva de ventas, sería la ejecutiva del año.  Se trata de eso, sin duda, de querer algo con todas tus fuerzas. Así lo siente la señora Harris desde el día en que ve en el armario de una de sus clientas, la señora Dant, dos vestidos de la casa Dior que la dejan absolutamente prendada. Puede una enamorarse de un hombre ( debe  una enamorarse de un hombre) y también de un objeto, por ejemplo, por qué no, de un vestido. Así que Harris (llamémosla así, apeando el tratamiento) se dedica a juntar una libra tras ot

"Un buen tipo" de Susan Beale

Si al leer este libro sacas la sensación de que Ted y Abigail son un matrimonio normal, con las frustraciones propias de ese estado, no estaremos de acuerdo. No debería haber nada de normal en la desesperación de ella porque su marido tiene tan poco tacto, repara escasamente en las cosas que su mujer hace bien y tanto en las que hace mal. Tampoco en el descuido con que Abigail se toma los pequeños logros profesionales de su marido. Es verdad que vender neumáticos tiene poca poesía pero, al fin y al cabo, lleva varios meses siendo considerado por su empresa "el vendedor del mes". Algo es algo. Aunque ese algo no satisfaga al exigente padre de Abigail , ni a su madre, que esperaban bastante más para el esposo de su hija. Los matrimonios presuntamente desiguales siempre terminan pasando factura. Haría falta, para evitarlo, una ración extra de amor y otra de autoestima.  Los domingos en casa de los padres de ella son una muestra evidente de que la pasión se ha desvanec

Completamente tuya

Este libro que he retratado sobre mi cama, con esas rosas de Francia color melocotón, es la primera biografía que se escribió sobre Jane Austen . Fue en 1870, aproximadamente cincuenta años después de su muerte, que había tenido lugar en 1817.  El autor de la biografía es su sobrino James Edward Austen-Leigh , hijo del hermano mayor de Jane y el objetivo que tuvo al escribirla no fue solamente dar certezas sobre ella, sino reivindicar su obra que, en esos años y durante todavía mucho tiempo, era considerada menor, novelitas para damas. A pesar de que su técnica narrativa tenía como base lo que todo buen novelista sabe que es la esencia de un texto (un entorno reducido, reconocible y cercano), Austen tuvo que soportar (y aún ocurre) el sello de superficialidad que las novelas en las que las emociones tienen un papel importante sufren. Sobre todo, si están escritas por mujeres y no tienen adulterios, suicidios ante trenes en marcha o trasfondo de capa y espada. Ya se sabe, los

"París era ayer" de Janet Flanner

(Portada del libro, editado por Alba)  La vida de la periodista Janet Flanner fue apasionante. Nacida en Indianápolis, en 1892, fue una de las mujeres que se declaró abiertamente bisexual y que, tras casarse, tuvo relaciones largas y profundas con dos mujeres. Solita Solano, con la que estuvo cincuenta años de forma intermitente y Natalia Murray, con quien acabó sus días.  Su vida personal era el trasunto de la profesional: activa y sin que hubiera tema o situación que ella no pudiera abordar, aun siendo una mujer. Fue la corresponsal del New Yorker en París desde 1925 a 1975 y formó parte del círculo de estadounidenses que constituyen la llamada Generación Perdida, expatriados, descontentos y llenos de escepticismo por todo y por todos. Ella conectó a estos americanos (Ernest Hemingway, F. Scott Fitzgerald, e.e. cummings, Hart Crane,  Gertrude Stein, Djuna Barnes entre otros) con los artistas de las últimas vanguardias, tanto pictóricas como literarias, Picasso, Braque, M