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Trilogía de Edna O´Brien

Este libro cierra la trilogía escrita por Edna O´Brien (Tuamgraney, Irlanda, 1932) y que tiene en "Las chicas de campo" y "La chica de ojos verdes", sus otras dos obras.  He comentado aquí ya la fascinación que me produce la lectura de O´Brien. Su descubrimiento me hizo entenderme a mí misma y mi propio interés por escribir sobre las mujeres y lo cotidiano. Una visión demorada, tranquila, pero certera es la que ella realiza en estos libros, escritos, respectivamente, en 1960 y 1964. Pero su vigencia no se ha perdido con el paso del tiempo, antes al contrario, sirven de explicación, de elemento aclaratorio de esa forma de vida femenina que me importa y me preocupa.  Kate y Baba son ahora dos mujeres casadas y viven en Londres. Se conocen desde siempre, desde muy niñas. Han compartido avatares de la vida, sentimientos, dificultades, carencias, luchas. Ahora ha pasado el tiempo. Kate ha sido madre. Su marido es el amor de su vida. El de Baba, un tipo que le

"Adiós a Berlín" de Christopher Isherwood

Uno de los personajes de este libro, la jovencita inglesa de clase alta llamada Sally Bowles, inspiró el personaje de Liza Minelli en la famosa película Cabaret.  Este libro, Adiós a Berlín , es "una crónica reveladora y emotiva del Berlín de la República de Weimar, decadente y atractivo, sobre el que se cierne la creciente brutalidad del nazismo"  Resulta estremecedor pensar en la ingenuidad humana. Vivimos la vida inmersos en una burbuja que a veces no estalla, pero que, cuando lo hace, nos cubre hasta los ojos de un agua turbia y fina, imposible de limpiar una vez que nos ha ensuciado. En los años históricos en los que el nazismo comenzaba a despuntar en Alemania, se escribieron alegres páginas de bailes, cafés cantantes y películas animosas, todas ellas perfectamente ajenas a la podredumbre que iba anegando los cimientos de la sociedad alemana y que, por fuerza, tenía que ir carcomiendo al resto de Europa.  La pavorosa indiferencia con la que los intelectu

Una ciudadana ejemplar

A veces tiene uno que vivir en primera persona las experiencias más duras para entender algunas cosas. No es ningún consuelo, desde luego, al contrario, revela la dureza de la vida, cómo te zarandea, te cambia la mentalidad y te convierte en alguien que no eres. O que no pensabas que eras.  Lidia Chukóvskaia y su marido, el físico, Matvéi Bronstein, eran del Partido. Ambos creían que sus postulados y sus acciones estaban encaminados al bien común. Así, hasta que se dieron de bruces con una realidad incuestionable: Matvéi fue apresado y ejecutado en 1938, aunque la versión oficial decía que estaba deportado y sin derecho a comunicación. Lidia Chukóvskaia vertió su sufrimiento y su incredulidad de la forma en la que sabía hacerlo, a través de la escritura. Era hija de escritor y, le misma, novelista, poeta, editora y crítica de libros.  Una ciudadana ejemplar que había cumplido hasta entonces con la fidelidad debida a un régimen y a un estado de cosas. De buena fe, seguramente.

El diario de Bridget Jones...A vueltas con Jane (Austen)

I like you very much, just as you are.  ¿Quién no querría sentirse amado tal y como somos?  "No creo que seas idiota. Bueno, sí que hay ciertos aspectos ridículos en ti, tu madre es muy interesante. Y realmente eres una oradora terriblemente mala. Y sueles soltar lo primero que te viene a la cabeza sin tener en cuenta las consecuencias. Comprendo que cuando nos vimos en el bufé del Pavo al Curry estoy imperdonablemente grosero y llevaba un jersey que mi madre me había regalado el día anterior.  Lo cierto es que, lo que intento decirte, con mucha dificultad, es que, en realidad, y tal vez a pesar de las apariencias, me gustas   muchísimo "  " ¿A pesar de que fume, de que beba, de que tenga una madre vulgar y diarrea verbal?..." " I like you very much, just as you are" "Me gustas muchísimo, tal y como eres" Esta escena crucial del "Diario de Bridget Jones" en la que se encuentran, al pie de una escalera, t

Misteriosa noche de Reyes

A la niña le dijeron que esa noche había que acostarse muy temprano. No era demasiado obediente pero, en este caso, tuvo claro que era mejor meterse en la cama. No supo cuánto tiempo permaneció dormida hasta que unos ruidos extraños la despertaron. Parecían crujidos. Misteriosos crujidos, pensó. Porque la niña era muy dada al misterio y todo lo tildaba de misterioso a poco que fuera algo raro. Como si alguien estuviera pisando el suelo de madera del cuarto de juegos de los niños. Ese suelo que habían colocado allí cansados de que todos anduvieran descalzos. Niños descalzos y resfriados eran ecuaciones fijas, así que pusieron ese suelo y parece que, hasta el momento, había dado resultado. Los crujidos eran irregulares, a veces se oían más y otras veces era difícil percibirlos con claridad.  Iban acompañados de unas ráfagas de polvo blanco que parecían entrar por debajo de la puerta. Todavía más misterio, pensó. Estaba terminantemente prohibido moverse de la cama, pero ella, cuando

"Emma" de Gwyneth Paltrow

El Año de Emma en este blog se dedicará a comentar las adaptaciones cinematográficas o televisivas de "Emma". Y no es empeño menor, habida cuenta de que son muchas, variadas y diferentes en su calidad y en su estilo. Sin orden cronológico, ni otro criterio más allá del vaivén personal de quien esto escribe, vamos a acercarnos a la forma en que los creadores audiovisuales han entendido el libro, lo han interpretado y hecho suyo.  Así, en 1996 el director Douglas McGrath realiza "Emma", cuya protagonista, Gwyneth Paltrow tuvo que comenzar por hacer el esfuerzo de hablar inglés inglés y no inglés americano. Parece que lo logró y que ese aprendizaje le serviría después para la galardonada "Shakespeare in love" por la que ganó un Óscar de la Academia. El físico de Paltrow está muy ajustado al de Emma, según la somera descripción de la autora de la novela, Jane Austen, que no era propensa a perder el tiempo haciendo descripciones ni de paisajes, ni de es

Qué es "El Año de Emma"

Decir que Jane Austen es una de mis autoras de cabecera sería quedarme corta. Es mucho más. Es un modelo de escritora al que seguir. Es la persona que ha creado un mundo ficticio en el que me sumerjo de todas las formas posibles y que me hace feliz. Es alguien que imaginó personajes, situaciones, momentos... y que les dio forma magistralmente, como solo un verdadero talento puede hacerlo. Un talento oculto. Porque, aunque ahora nos resulte difícil de entender, no llegó a ver firmadas ninguna de sus obras. No. Todas eran anónimas o aludían, sencillamente, a "Una dama" o "Del autor de...". Eso me parece tan triste...Porque la autoría es lo que le queda al artista cuando todo lo demás deja de existir. Afortunadamente la posteridad le ha hecho justicia y por eso nos han llegado sus obras, en múltiples ediciones y formatos, incluido el musical o el visual. Jane Austen ha creado todo un mundo con sus novelas. Y lo hizo sin grandilocuencia, desde la pequeñ

Los libros que vienen

Entre los augurios del nuevo año siempre aparecen noticias sobre las publicaciones que verán la luz, la mayoría de ellas, si no todas, obras de escritores reconocidos que, por eso mismo, anuncian sus novedades y se presentan como reclamos editoriales. He repasado ya algunas de esas listas y señalado los libros que me pueden interesar aunque, a tenor de lo que ha ocurrido con mis lecturas en 2014, bien podría ser que las cosas fueran por otros derroteros.  Sí, porque en 2014 el libro que más me ha impresionado, el que me ha permitido descubrir a una excepcional escritora, ha llegado a mí por casualidad y debido a mi olfato lector, el que hace que, buscando entre las estanterías de una librería o entre un escaparate virtual, sea capaz de distinguir algo que me va a gustar. Esta escritora es Edna O´Brien y el libro se llama "Las chicas de campo", publicado por ErrataNaturae. Extraordinaria descripción de unos personajes, de una historia, que, en su cotidianeidad tiene la ma

Recorriendo la ciudad...

Por cuestiones que no vienen a cuento, hoy, día de diario, víspera de un puente, recorro la ciudad de un lado a otro y observo lo que pasa en ella. Uso la mirada de quién acaba de aterrizar en el aeropuerto procedente de otro país, o, también, de alguien que vuelve de un largo viaje. La mirada del que ve las cosas por primera vez. Aunque no es cierto, y no sé si el cerebro se dejará engañar por esta intención literaria. Como ocurre con todas aquellas personas que nos dedicamos a escribirlo todo, a escribir siempre, a no dejar de escribir, vivo la mañana y la voy relatando al mismo tiempo, así que ahora ya no podré distinguir lo que viví y lo que pensé mientras lo hacía. Las palabras se han colocado en el lugar exacto de las vivencias. Es así.  El autobús lleva muy poco gente. Nadie se saluda, nadie se habla, todos están ocupados en hablar con alguien que no está a su lado, a través del móvil. Algunos esperan serios que llegue su parada. Pero no hay ningún movimiento para acercar

"Platero y yo"...y yo

No sé si en algún lugar de este blog he escrito algo sobre "Platero y yo", pero da igual. Porque podría dedicarle muchas páginas, porque hay muchos recuerdos, muchas vivencias enhebradas a su lectura. En todo caso, como las efemérides han de servir para renovar en nosotros el deseo de leer, aprovecho que se celebra estos días el centenario de su publicación para escribir de ese libro, mal llamado de niños, que tantas veces he leído, oído y escrito. En mi colegio se usaba "Platero" para hacer dictados. Páginas enteras del libro las conservo en mi memoria, porque yo también he utilizado esas pequeñas historias, esas imágenes impresionistas, para trabajar de mil y una formas. He sentido que "Platero" es una cumbre de la poesía, sí, de la poesía en general. No es solamente prosa poética, es poesía en prosa, que va más allá. Algunos de sus pasajes tienen un nivel tan alto de emoción que te producen sentimientos encontrados, sensaciones que no puedes desc

Miénteme...

Miras hacia arriba y las luces te deslumbran. Miles de bombillas formando dibujos, cruzándose, como si fueran mosaicos romanos, lacerías árabes, como si fueran un bordado en seda, tejido con manos cuidadosas. Resplandecen los árboles de la inmensa avenida, cuajados de pequeñas estrellas, como si hubieran nacido flores luminosas, una floración extraña en el invierno.  Te esperaba al pie de la estación. A lo lejos distingues su figura. Su aspecto, tan conocido, tan amado. Su sonrisa, anunciándose anticipadamente, una sonrisa abierta hacia la espera. Distingues sin oírla su voz. Esa voz que no parece cambiar a pesar de que el tiempo pasa. Una voz que dice cosas que te estremecen. Que nunca te hiere. Que siempre te consuela. Ves el movimiento de sus manos, ese gesto especial de descansar en ellas la barbilla, esa forma de tomarte de la cintura, de sujetarte la cara mientras te besa...Esas manos... La risa os ha mezclado en un suave vaivén y las palabras se amontonan...hay tanto qu

Soledades

A veces lees un poema y entiendes el significado exacto de las palabras. El poeta las escribió y tú las recibes como si hubieran sido escritas para ti, incluso como si tú las hubieras escrito. En ocasiones paseas por una ciudad y sus calles, sus edificios, están llenos de una pátina especial que te llama a entenderlos, como si tu itinerario sentimental se escribiera de la misma forma que se trazaron en su día las líneas, los recovecos, las cuestas, de su topografía. También puede ocurrirte con una película. Las imágenes se enlazan entre ellas y se introducen dentro de ti, en tu cabeza, en tu corazón, creando una simbiosis perfecta, con un lenguaje propio que tú conoces y que tiene las claves de tantas sensaciones que te resultan imposibles de explicar...Nadie, salvo tú misma, entiendes el motivo de esa identificación que se abre paso a veces... Confieso que me gusta Hopper y que su pintura me lanza una llamada, un hilo de mensajes, como si fuera una red social que te pregunta, que

Cuentos para mi niño: El mago despistado

Dedicatoria: A Antoñito, el chiquilín El mago Oz vive en el pueblo de Lión. Su casa es verde, su nariz es verde y su risa es verde. Oz hace magia pero siempre se equivoca. Hace trucos muy raros. Se confunde con la varita mágica.  Un día se topó con un grillo. El grillo le pidió un favor. Quería ir a la Luna. Pero no sabía nada de cohetes. Oz le dijo: No te preocupes. Te daré un golpe de varita. Pero la varita se equivocó y mandó al grillo a un árbol del parque.  Oz decidió construir un cohete. Cogió una lata, un palo y dos cajas viejas. Lo tocó todo con la varita ! y apareció un despertador !. Dio otro golpe y salió !un pato amarillo! Luego otro y apareció !un bebé de gorila! Oz se echó a llorar.  Fue a visitar al viejo dinosaurio del valle. Se llamaba Arisauro. Este le animó. Arisauro era viejo y listo. Se puso a dar clases de magia a Oz. Le enseñó a mover la varita: !Arriba! !Abajo!  !Rápido! !Despacio! También le enseñó a hacer pócimas: la póc

Cuentos para mi niño: El ratón Fiti

Cuando mi hijo era chiquito yo le escribía cuentos. En unos cuadernillos de cuadros que confeccionaba y cosía le contaba historias simpáticas de animales y personajes curiosos. Las cosas que a los niños les gustan. A mi hijo le gustaban y le gustan todavía los tebeos de Mortadelo, las historias de Tintín, los Astérix y otros cómics. Seguramente todo empezó con esos cuentos escritos a mano por mí y que ahora transcribo: El ratón Fiti Dedicatoria: A Antoñito, pitufito " H abía una vez un ratón. Se llamaba Fitipaldi. Era un ratón muy veloz. Sus amigos lo llamaban Fiti.  El ratón Fiti vivía en un pequeño pueblo. Allí las casas eran muy chicas. Pero Fiti vivía en un caserón.  ¿Sabes qué es un caserón? Pues sí, eso, una casa muy grande. Allí Fiti no vivía solo.  En el caserón vivían también dos hombres. Uno de ellos era bajito y con bigotes. El otro era alto y flaco.  Un día hubo un lío gordo. El ratón se comió el queso de Gus, el bajito, y se bebió el zumo de Abo,