Tamara de Lempicka: frío glamour
Tan espectacular en sus posados fotográficos como en su obra Tamara de Lempicka es una de esas artistas que se reconocen sin ser un experto en arte. Su estilo es, lo que se llama, inconfundible. El art-déco pasado por un diálogo con el color que nos trae vigorosos verdes, azules, rojos y anaranjados, puestos al servicio de la sensualidad femenina y de espectaculares puestas en escena. La mayoría de sus cuadros tiene a las mujeres como protagonista y ella misma aparece en extraordinarias poses captadas por eminentes fotógrafos. Aunque no fue fácil que su pintura tuviera reconocimiento, cuando lo logró ella fue muy consciente: “Fui la primera mujer que hizo pinturas claras y evidentes; y ese fue el secreto del éxito de mi arte. Entre cien cuadros, es posible distinguir los míos. Y las galerías comenzaron a ponerme en sus mejores salas, siempre en el centro, porque mi arte atraía al público”. Su biografía es tan exótica como sus cuadros. Ella ocultó datos sobre su lugar y fecha de nac